Dulce María Ardón aseguró que de obtener esta declaratoria, el inmueble no tendría que ser necesariamente utilizado para eventos taurinos
Los profesionistas que forman parte de la Asociación de Cronistas Municipales del estado de Querétaro están a la espera de una segunda reunión con el diputado local José Luis Báez Guerrero, para establecer el procedimiento e iniciar el trámite para que la plaza Santa María sea declarada patrimonio cultural material, afirmó Dulce María Ardón, cronista del municipio de Corregidora.
“Los agremiados a la asociación de cronistas ya habíamos tenido una reunión en la que estuvimos de acuerdo en apoyar que se declare a la Plaza Santa María patrimonio material, por lo que solo estamos en espera de que el diputado José Báez nos cite para darle continuidad, pero nosotros los cronistas estamos en la mejor disposición para trabajar en ese proyecto que vemos viable”.
Aseguró que la comunidad de Querétaro está ansiosa de esta declaratoria, aunque el coso no tenga que ser necesariamente utilizado para eventos taurinos.
“Digamos que la plaza obtendría reconocimiento para ser conservada y no necesariamente tiene que seguir siendo objeto para las corridas de toros, sino que puede destinarse a otro uso; lo importante es que la plaza no sea demolida, sino que se conserve con algún otro fin, es decir, puede utilizarse como museo o biblioteca”.
Consideró que una vez conociendo el interés real que tiene la familia propietaria de este recinto, al proyecto de conservación también podría sumarse la iniciativa privada.
Recordó que hace un siglo, la plaza fue construida en un terreno que pertenecía al municipio de Corregidora; sin embargo, todos los territorios de los municipios se han ido moviendo y ahora ya pertenece al municipio de Querétaro.
“Primero hay que conocer la opinión de la familia dueña del inmueble y hacerle saber que es necesaria su conservación, con independencia del uso que se le dé y por otro lado, la participación de la iniciativa privada es fundamental para que se remodele y utilice para otro tipo de espectáculos, como ha ocurrido en otras partes del mundo donde convierten las plazas de toros en hotel”.
