Samsung presentó su nuevo Galaxy Z Fold2, nuevas versiones de su teléfono inteligente de gran tamaño, los Galaxy Note20 y Galaxy Note20 Ultra, así como tabletas mejoradas
Samsung presentó el miércoles una versión mejorada de su teléfono inteligente plegable junto con otros dispositivos, con el objetivo de impulsar las ventas de estos productos tecnológicos en un mercado deprimido por la pandemia mundial de coronavirus.
El Galaxy Z Fold2 fue uno de los dispositivos nuevos anunciados en un evento transmitido en vivo por el gigante de la electrónica de Corea del Sur, que perdió recientemente la primera posición en el mercado de teléfonos inteligentes frente a Huawei, con sede en China.
Samsung también presentó dos versiones de su teléfono inteligente de gran tamaño, los Galaxy Note20 y Galaxy Note20 Ultra, así como tabletas mejoradas llamadas Tab S7 y S7 +, un nuevo reloj inteligente Galaxy Watch3 y sus auriculares ergonómicos inalámbricos llamados Galaxy Buds Live.
«Nunca antes nos habíamos apoyado tanto en la tecnología como lo hacemos hoy. Es cómo nos mantenemos conectados mientras navegamos por los desafíos extraordinarios que enfrenta el mundo», expresó T.M. Roh, jefe de comunicaciones móviles en Samsung Electronics.
«La tecnología debe hacer la vida más fácil, no más compleja. Es por eso que hemos introducido cinco nuevos dispositivos de energía. Solos, estos dispositivos son herramientas poderosas para ayudar a maximizar el trabajo y el juego», acotó.
Los lanzamientos estarán disponibles pronto en mercado y los precios son considerables.
Por ejemplo, el Galaxy Note20 estará en venta a partir finales de mes en Estados Unidos y su precio inicial será de 999.99 dólares.
Según el estudio de investigación IDC, en el segundo trimestre Samsung registró una caída de 29 por ciento en las ventas de teléfonos inteligentes en comparación con el año anterior, lo que le hizo perder el liderato del mercado contra Huawei.
Las ventas totales de teléfonos inteligentes disminuyeron un 16 por ciento en el trimestre, a medida que los consumidores retrocedieron ante una crisis económica inducida por una pandemia.
