Lo anterior, tras los hechos ocurridos durante la noche del sábado 11 noviembre, cuando habitantes de la comunidad de El Nabo bloquearan el anillo vial Fray Junípero Serra y el Paseo de la República
El vocero de la Diócesis de Querétaro, José Martín Lara Becerril, declaró en entrevista que las manifestaciones sociales deben ser prudentes y no un mecanismo para ejercer presión social a las autoridades por parte de la ciudadanía, tras los hechos ocurridos durante la noche del sábado 11 noviembre, cuando habitantes de la comunidad de El Nabo bloquearan el anillo vial Fray Junípero Serra y el Paseo de la República.
Martín Lara explicó que el derecho de manifestación debe hacerse valer, siempre y cuando no se afecte a terceros, ya que, al ejercer presión social, únicamente hace que crecer un problema, ya que no se consideran las consecuencias que este puede ocasionar.
“En este tipo de acciones sociales, lo que tiene que prevalecer es la prudencia, todos tenemos derecho de manifestarnos, pero también necesitamos prudencia (…) debemos tener canales de diálogo y ciertamente tapar una calle es para ejercer presión social”, dijo.
El vocero de la diócesis afirmó que el bloqueo de calles o vialidades no es la solución para cualquier conflicto, por lo que se tiene que interponer el diálogo entre manifestantes y autoridades para buscar la concordia y sana convivencia sin afectar a terceros.
“La solución es sentarse a la mesa y escuchar la necesidad para buscar una solución, creo que la prudencia tiene que prevalecer, junto con el diálogo, siempre que haya disposición de ambas partes”, dijo.
Agregó que deben buscarse alternativas para la solución de conflictos sociales, ya que no se puede pedir solución a estos ocasionando otros que afecten de forma inmediata a terceros, aunque subrayó que, ante omisiones o vacíos de poder por parte de la autoridad, las manifestaciones representan el último recurso.
“Hay que decirlo también: cuando hay una omisión total en el gobierno o hay un vacío de poder, el último grito a la justicia son las manifestaciones, el último grito cuando hay un caso totalmente omiso que a veces es bueno y otras veces no”, puntualizó.