La UAQ consideró inviable que en el antiguo Hospital General de Querétaro se construya un nosocomio universitario; sin embargo, dijo que es más factible que se fortalezca una clínica en el Campus Aeropuerto hasta convertirse en uno
La rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Silvia Amaya Llano, refirió que no es viable que en el antiguo Hospital General de Querétaro se construya un hospital universitario; por el contrario, refirió que es mucho más factible que una clínica en el Campus Aeropuerto se fortalezca hasta convertirse en un hospital universitario.
“En la última reunión que tuvimos con el gobernador decía que esto del Hospital General de momento era complicado pero podríamos buscar algún otro esquema. También nos comentó que el recurso como tal, otorgar un recurso adicional para infraestructura no le era tan fácil, pero podríamos buscar otros esquemas. Yo creo que es preparar un proyecto, espacios para construir un hospital universitario creo que tenemos en Campus Aeropuerto. Habría que ver en que nos conviene más”, afirmó.
Enfatizó que contar con un hospital universitario aumentará el número de campos clínicos que podrían ser de beneficio para los estudiantes de la Facultad de Medicina y áreas de la salud.
Sobre la petición de que se construya el hospital universitario en el antiguo Hospital General de Querétaro, mencionó: “El pedir, por supuesto, que lo podemos pedir y seguir insistiendo; el que sea viable lo veo complicado. Ellos lo que comentan es que la mayor parte del hospital antiguo ya está muy deteriorado y tendría que demolerse. Hablando en dinero, demoler y luego construir, suena muchísimo más costoso que el decir, bueno, en un espacio nuevo hacemos a lo mejor comenzando de manera más conservadora con una clínica y después irla creciendo hasta ser un hospital”.
Por otra parte, subrayó que el gobernador Mauricio Kuri González se comprometió a otorgar a la UAQ un incremento presupuestal de por lo menos 13 por ciento. Reiteró que el Presupuesto federal para la universidad podría ser proporcional a la inflación y equivalente a 4 por ciento.