La intención de la iniciativa es contrarrestar desde un marco normativo la injerencia del poder Judicial en algunos proyectos de gobierno, como el Tren Maya
El Senado aprobó modificaciones a la “Ley de amparo”, con el fin de impedir la oposición a decisiones del gobierno federal, según Karla Mariscal Ureta, jefa de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Derecho, en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
Es una reforma que, según esta académica, inhibe el procedimiento de declaratoria general de inconstitucionalidad, cuando lo que se está buscando es una impugnación constitucional en contra de normas generales.
“A los ciudadanos de Querétaro, como de todo el país, les rompe el principio de igualdad jurídica”, comentó.
Mariscal Ureta considera que, desde el punto de vista jurídico, la mencionada reforma tendría que analizarse en el sentido de tres aspectos: la defensa del orden constitucional, de los derechos humanos que reconoce el propio orden constitucional y de la expansión o no de los mecanismos de control constitucional que salvaguardan este orden.
“Mientras que, desde el punto de vista político, la intención de las fracciones parlamentarias que soportan esta iniciativa es contrarrestar desde un marco normativo la injerencia del poder Judicial en algunos proyectos de gobierno, como el Tren Maya, donde ha habido un paro en estos debido a ciertas resoluciones, específicamente con la figura de la suspensión con efectos generales”, expresó Mariscal.
La iniciativa presentada por Ricardo Monreal Ávila, senador de Morena, tuvo como objetivo reformar los artículos 123 y 148 de la “Ley de amparo” vigente.
El político expuso que la reforma busca evitar la vulneración del principio de legalidad, al cual deben someterse los juzgadores, porque en algunas ocasiones se han otorgado suspensiones de modo discrecional.
Al final se aprobó en lo general, con 68 votos a favor, particularmente del grupo parlamentario de Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo, y 42 votos en contra.
