Martín Lara Becerril consideró que 2022 estuvo lleno de grandes retos y emociones, tras dos años de pandemia por Covid-19, por lo que, dijo, es fundamental apelar al perdón y al agradecimiento
El 2023 debe ser un año que tenga como base la esperanza, con la finalidad de construir una sociedad en paz, refirió el vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril.
“La actitud de la esperanza, creo que esta actitud tiene que mover montañas y a nosotros mismos; esperanza en que seremos mejores en la vida, esperanza en nuestra familia; esperanza en una sociedad pacífica, en estar en una sociedad de paz”, dijo.
Consideró que 2022 estuvo lleno de grandes retos y emociones, tras dos años de pandemia por Covid-19, y que por ello es fundamental apelar al perdón y al agradecimiento.
“Una actitud de perdón; perdón a Dios por nuestros pecados, pedir perdón a los demás por el mal que les hayamos causado, pero perdonarnos a nosotros mismos. Después de la pandemia ha habido una grandísima depresión, una sensación de culpa de muchas de las personas, entonces, necesitamos perdonarnos a nosotros mismos”.
Así mismo, Lara Becerril se refirió a la muerte del Papa emérito Benedicto 16, a quien describió como un gran teólogo, un pastor sabio y un Papa humilde.
“Queremos reconocer tres grandes cosas: fue un gran teólogo, pensador cristiano del siglo 20, un gran pensador de la iglesia católica y, además, estuvo en la doctrina de la fe; un hombre muy lúcido en su pensamiento, apegado a la tradición de la iglesia”.
Añadió que el Papa fue humilde y con la “valentía necesaria” para renunciar al pontificado de la iglesia católica en febrero del 2013, siendo el primer papa en hacerlo en casi 600 años.
“Nosotros nos unimos a toda la iglesia universal, expresando nuestro más claro y sentido pésame. Después de la muerte del Santo Padre, a nosotros nos queda una triple realidad de su vida y creo que el Papa, aunque ya no está con nosotros, su figura quedará siempre presente en la historia de la iglesia y del mundo entero”.
